O FÚTBOL É ASÍ..., Hotman

Por si cabía alguna duda, Pableras no sólo se ocupa del diseño gráfico del blog y/o de homenajear (esporádicamente) la vida de finos porteros de guante blanco o pintorescos entrenadores, y es que su afán periodístico, propio de grandes como Jesús Quintero, Mercedes Milá o Ana Rosa Quintana (?), le ha llevado a entrevistar a una de las grandes promesas del fútbol gallego ("un Pavón, pero a la gallega..."), que nos ha regalado una interesantísima (e imperdible) charla en la que nos contó (entre muchas otras cosas) como se vive el fútbol compartiendo entrenamiento con Diego Tristán a las órdenes de Jabo Irureta, con todo un repertorio de anécdotas y reflexiones a dignas de ser tenidas en cuenta. Señoras y señores, con ustedes Pablo Fernández Segurado:

Renaldinhos y Pavones: Lo primero felicitarle, está usted hoy de cumpleaños, 24 añazos nada menos, está hecho un hombretón.
Pablo Fernández Segurado: Muchas Gracias...



RyP: Defínanos a Pablo Fernández Segurado como jugador de fútbol. ¿Con quién se identifica?
PFS: Salvando las enormes distancias, con Juan Carlos Valerón. Los dos somos físicamente algo limitados, nos gusta dar el último pase y además, somos más felices dando un pase que marcando un gol. Ojalá se recupere porque es de los pocos jugadores que quedan en la Liga Española con esa calidad y forma de ver el fútbol.

RyP: ¿Tiene algún mote?
PFS: Tengo algunos cuantos: Pumuki, Pufo, Cervo, Doriforo y Raposo.

RyP: ¿De qué equipo es seguidor?
PFS: Soy del Real Madrid, aunque, y no es por hacer la rosca, le he pillado cierto cariño al Deportivo.

RyP: ¿En qué jugadores se fijaba de chaval? ¿Y ahora?
PFS: Mis ídoos de chaval eran Míchel y Laudrup. Jugaban a través del pase, y eren tremendamente elegantes; hacían mucho mejores a los demás. Ahora tengo que buscarme otro, porque Zidane se ha retirado.

RyP. ¿Cómo se inició en esto del fútbol?
PFS: Supongo que como todos. Antes se jugaba al fútbol a todas horas y en todos sitios. Soy el más joven de mis hermanos y primos, y como todos ellos jugaban, no tenía más opciones.



RyP: ¿Formó parte de alguna selección juvenil española o gallega?
PFS: Participé con la selección juvenil gallega en un campeonato en Mallorca. Con la de aficionados no tuve mucha suerte, ya que aunque acudía a los entrenamientos, siempre que se iba a disputar un campeonato, me encontraba lesionado…

RyP: ¿Qué sintió al entrenar por primera vez junto a los jugadores de la primera plantilla del Deportivo?
PFS: Al principio estás bastante expectante porque no sabes qué decir ni qué hacer. No los conoces y no quieres meter la pata. Poco a poco te vas metiendo en la dinámica. Siempre había alguno que se te acercaba y todo se hacía más familiar. Tienes que estar muy concentrado porque de lo contrario te pasas toda la mañana en el medio del rondo… (risas)

RyP: Estuvo convocado en el encuentro que enfrentó a Olympiakos y Deportivo…. ¿Qué recuerda de aquel partido?
PFS: Del partido en sí no recuerdo muchas cosas. Sé que perdimos 1-0 y que en el banquillo estaba sentado entre Mauro Silva y Pandiani. Yo estaba más pendiente del ambiente, de disfrutar de aquello: ver a Rivaldo, fijarme en las gradas, escuchar a Irureta…

RyP: ¿Cómo vivió los días previos al viaje?
PFS: Yo había jugado el sábado anterior con el Fabril, y habíamos ganado. Salí a tomar algo con unos amigos y la noche se complicó algo…Llegamos a la residencia un poco tarde y armando jaleo con cánticos y demás. A la mañana siguiente me llamó Tito Ramallo. Yo pensaba que era para echarme una pequeña bronca, pero no: era para decirme que iba convocado. Después comencé a recibir llamadas de amigos y todas esas cosas…

RyP: ¿Le sentó mal que el mister no le hubiese dejado aprovechar la oportunidad? ¿Qué le dijo Jabo en el vestuario?
PFS: Yo ya sabía que no iba a jugar. Era totalmente consciente. Aquello para mi ya era más que un premio. Jabo no me dijo nada especial, me saludó y me dijo que entrenase y actuase con normalidad, como en el filial.

RyP: A pesar de no haber disfrutado de ningún minuto ese día, el mister contaba con usted frecuentemente para entrenar con la primera plantilla. ¿Cómo era el ambiente?
PFS: Tuve la suerte de ir a menudo a entrenar, con lo que acabé pillando cierta soltura y confianza con algunos de ellos. El ambiente era bueno, se percibía que había cierta monotonía en los comportamientos y en los hábitos por llevar tanto tiempo trabajando juntos y con el mismo entrenador.

RyP: ¿Guarda algún recuerdo de aquel partido?
PFS: Pues tengo la camiseta, y Barros, el delegado, me dio una hoja en la que salían las alineaciones, suplentes, árbitro…Una hoja oficial que da la Liga de Campeones parecida a lo que aparece en la tele antes del partido.

RyP: ¿Llegó a conocer algún secreto inconfesable de algún jugador?
PFS: No, no me coincidió ir a ninguna fiesta con ellos, pero tengo algún amigo que sí…De aquí no puedo pasar, lo siento…

RyP: Háblenos de Diego Tristán, ¿Es cierta la leyenda? (que dice que se conoce todos los bares y discotecas de Coruña y cercanías) ¿Abdominales tipo tableta de chocolate o pared de ladrillo?
PFS: (Risas) No tenía una tableta pero tampoco estaba tan gordo. Es cierto que no estaba en su peso, pero no era algo exagerado. Yo conozco esas leyendas, pero no sé si son verdad o mentira. He de decir que Tristán tuvo un trato excepcional conmigo, siempre me hablaba y me preguntaba cosas, y si me veía por la calle se paraba a charlar un rato. Conmigo fue muy agradable. Lo tengo encontrado por la noche e invitarme a tomar una copa. Yo nunca lo vi borracho, y eso de que era borde…mira, un día estaba hablando en un pub conmigo y se le acercó una chica. Él le dijo que iba ahora que estaba hablando con un amigo, que ahora iba a sacarse una foto o no sé qué…Ella le respondió algo así como que no fuera tan chulo por ser quién era…Yo aluciné, pero él se lo tomó con normalidad, como si no fuera la primera vez. Hay muchas cosas que se exageran o que incluso puede que no sean verdad.

RyP: ¿Era Changui tan buen futbolista como NO demostraba en el terreno de juego?
PFS: Changui definía muy bien. En los remates a puerta era de los mejores, aunque después en el juego ya se le veía más limitado.

RyP: ¿Qué jugador le impresionó más? ¿Y menos? ¿Por qué?
PFS: Me llamaron la atención Romero y Pablo Amo. Romero tenía mucha calidad, y Pablo Amo era muy rápido y hábil con el balón en los pies.

RyP: ¿Quién era el más vago de aquella plantilla?
PFS: No lo sé, pero desde luego Munitis no. Era siempre el primero en todo. Se empleaba al máximo. Todos los días después de entrenar se quedaba en el gimnasio. Su cuerpo era espectacular....


PD: CRIMINAAAAAAAALLLL