15 jun 2009

PARA QUE QUEDE CLARO: FALA O TRIBUNAL CONSTITUCIONAL SOBRE AS LINGUAS VEHICULARES E O "APARTHEID LINGÜÍSTICO" por Tresillo







SENTENCIA DO PLENO DO TRIBUNAL CONSTITUCIONAL DE 23 DE DECEMBRO DE 1994


"Hoy es una cuestión indiscutida que del carácter oficial de una lengua deriva un deber de los poderes públicos de disponer los medios precisos para que todos los ciudadanos puedan acceder a su conocimiento y un deber también de los poderes públicos de incorporar la lengua oficial como asignatura obligatoria en los planes de enseñanza[...].

El hecho de que el constituyente no incluyese ninguna referencia expresa al pretendido derecho de opción lingüística en la enseñanza indica ya que ése no es un derecho fundamental o de reconocimiento constitucional, sino que su reconocimiento en la Ley cuestionada ha sido una opción del legislador autonómico [...].

[...]considerar que existe un derecho de elección de la lengua vehicular significaría reducir ese amplio abanico de posibilidades de adaptación a una sola opción legítima, el modelo del doble sistema de enseñanza, separado por razón de la lengua, modelo que no es el más recomendable si se persiguen unos objetivos de integración social.

Pretender deducir el derecho a elegir la lengua vehicular de la enseñanza de los valores superiores de nuestro ordenamiento o de los principios y derechos constitucionales citados por el cuestionante resulta totalmente desacertado[...]

Así, si se considerase que existe un derecho a la elección de la lengua vehicular en todos los niveles de la enseñanza, el resultado que inevitablemente se provocaría sería el establecimiento de un doble sistema educativo en razón de la lengua, creando una separación que favorecería la aparición de dos Comunidades lingüísticas diferentes y tendería a separarlas, de forma que no sólo no favorecería la igualdad en los términos del art. 9.2 CE o la integración social de los diversos pueblos, culturas, tradiciones y lenguas de España, sino que más bien podría llegar a perjudicarlas. [...]


De igual manera, el desarrollo de la personalidad y la participación de todos los ciudadanos en la vida política, económica, social y cultural queda claramente favorecida si se consigue que los alumnos se doten de una capacitación lingüística suficiente en las dos lenguas oficiales a lo largo del proceso escolar, y ése es el objetivo que persigue la incorporación de la lengua vernácula como lengua vehicular[...]


El derecho a la elección de la lengua de enseñanza sólo puede ser objeto de reconocimiento al considerar el derecho a la educación en la configuración que de él hace el art. 27 CE, determinando si forma parte del contenido esencial de éste. Por otra parte, conviene hacer la distinción respecto del derecho a la libertad de uso de una lengua por parte del alumno (lo que sí entroncaria directamente con los arts. 1.1 y 10.1 CE), que no es objeto de controversia puesto que no es regulada, ni por lo tanto afectada, por los preceptos cuestionados, y la actividad de enseñanza en cuanto es objeto de ordenación y prestación y a través de la cual se satisface el derecho a la educación. La lengua de la enseñanza se inscribe dentro de la dimensión prestacional del derecho a la educación, por lo que lo que conviene establecer cuál es el alcance que cabe atribuir a la voluntad de los educandos, o de los padres en representación de éstos, en la determinación de las condiciones de obtención de la prestación [...
]

Al regular la lengua en que el docente, en cuanto agente del servicio, debe desarrollar su actividad profesional, en el ámbito de la enseñanza reglada, no se está incidiendo sobre la libertad del alumno, ni atentando a su dignidad humana, siempre y cuando lo que se pretenda con ello no sea imponerle esa lengua para su uso personal o limitarle el uso de la propia habitual si es distinta, pretensión que de ningún modo aparece reflejada en los preceptos cuestionados [...] parece meridianamente claro que el desarrollo de la personalidad del niño sólo puede verse dificultado o impedido por razones idiomáticas cuando éste no entiende la lengua empleada por el docente. A partir del momento en que ésta le es comprensible, la lengua cumple su función de comunicar y carece de aptitud para impedir el desarrollo de la personalidad del alumno. Frente a la tesis de considerar que el derecho de elección de la lengua vehicular integra la dimensión lingüística del derecho a la educación genéricamente considerado, cabe oponer que el propio Tribunal Constitucional se ha encargado de rechazarla[...]

[...] el contenido del deber constitucional de conocimiento del castellano -que este Tribunal ha precisado en la STC 82/1986- no puede generar un pretendido derecho a recibir las enseñanzas única y exclusivamente en castellano [...] no puede ponerse en duda la legitimidad constitucional de una enseñanza en la que el vehículo de comunicación sea la lengua propia de la Comunidad Autónoma y lengua cooficial en su territorio, junto al castellano[...]

El derecho de todos a la educación, no cabe olvidarlo, se ejerce en el marco de un sistema educativo en el que los poderes públicos -esto es, el Estado a través de la legislación básica y las Comunidades Autónomas en el marco de sus competencias en esta materia- determinan los curriculos de los distintos niveles, etapas, ciclos y grados de enseñanza, las enseñanzas mínimas y las concretas áreas o materias objeto de aprendizaje, organizando asimismo su desarrollo en los distintos Centros docentes; por lo que la educación constituye, en términos generales, una actividad reglada. De este modo, el derecho a la educación que la Constitución garantiza no conlleva que la actividad prestacional de los poderes públicos en esta materia pueda estar condicionada por la libre opción de los interesados de la lengua docente. Y por ello los poderes públicos -el Estado y la Comunidad Autónoma- están facultados para determinar el empleo de las dos lenguas que son cooficiales en una Comunidad Autónoma como lenguas de comunicación en la enseñanza, de conformidad con el reparto competencial en materia de educación [...].

[...] se puede afirmar que el modelo de conjunción lingüística por el cual se ha decidido el Gobierno Autonómico no vulnera ningún derecho ni libertad fundamental, si se aplican los criterios usados por el Consejo de Europa en la Carta Europea de Lenguas Regionales y Minoritarias, adoptada en Estrasburgo el 5 de noviembre de 1992, y firmada hasta hoy por catorce Estados miembros y entre ellos España, si bien pendiente de ratificación."

13 comentarios:

Norit dijo...

Existe un camiño intermedio estre o apartheid lingüístico e o monolingüismo. Non creo que sexa a mellor opción separar aos rapaces en función da lingua que prefiran empregar, pero si darlle opción a que, en aquelas asignaturas que non son galego ou lingua, profesor e alumnos poidas escoller en función das súas preferencias o idioma que desexen para falar en clase ou facer o exame. A cuestión e non impoñer unha lingua sobre otra, para evitar que teñamos analfabetos lingüísticos que tan só saben falar en galego ou en castelán.

Norit dijo...

Por certo a foto que ilustra esta entrada é a de Feijóo acompañado de dúas asistentes á manifestación da Asociación Víctimas do Terrorismo tal e como testemuñan os logos das súas camisetas: a bandeira de España e as siglas AVT. Non entendo moi ben que ten que ver co obxecto deste texto salvo claro que a fobia dalgúns esta precisamente en persoas como estas que protagonizaron unha rebelión cívica ante o esquecemento e a negociación política cos asasinos de ETA.

Escapado dijo...

Pero como me pos esa foto Tresi, pensaba que o que confundia as churras coas merinas era eu.
Por certo vaia monstruo ou mellor dito monstrua que creastes, preparadevos o Xogador e mais tí, vai ser un can de presa mais fero que o mismisimo Rambo.

TRESILLO dijo...

Sobre a foto...nada que dicir...rectifico...certamente está fóra de contexto. Non hai fobia algunha, máis alá de que esteña a favor dos postulados da AVT, este tema certamente non está vinculado con ese fenómeno que ti chamas revelión cívica (vocablos moi apropiados). Certamente se así foi, deriva do meu descoñecemento (mea culpa)...tal vez por que tales vocablos vamos ter que apropiarnos nos deles para demostrar a "ductilidade" da linguaxe.
Ao marxe desto. Norit, vou tentar respostarche a este e ao anterior comentario do outro artigo o máis sintéticamete que poda, cousa que non é precisamente unha das miñas virtudes.
Respecto dos paradigmas que me expós como reflexo da "imposición" lingüística do galego. Bastaría decir que partes dun presuposto un tanto falaz para rebatir os meus argumentos. Intúo que eres unha persoa moi vinculada á política de partido (se me equivoco, prégoche desculpas) e tés por costume utilizar ese modo argumentativo sofista chamado petitio principii ou falacia circular, de xeito que aos argumentos xerais que eu propoño (a realidade lingüística de Galicia a través do seu reflexo mediático, administrativo, político, cultural, etc..) ti rebátesme con outros de alcance particular, escapando de dar razóns polas cales os fenómenos que eu mostrei (a globalización como axente desequelibrante da normalización lingüística a través dos medios de comunicación e o mercado...mesmo para o castelán nalgunhas partes do mundo). É dicir, de xeito sinxelo: tratas de postularme de xeito particular (unha determinada subvención (certa) e unha determinada actuación administrativa) para demostrarme de xeito xeral que o galego dalgún xeito é imposto.
Como che dicía o teu xeito de argumentar parte dun presuposto falaz moi propio dos políticos ou dos seus acólitos.
Pero non por iso vou deixar de contestarche, desde unha humilde perspectiva xurídico-política.

Sobre as solicitudes para promover unha determinada actuación administrativa. Se é así, tal como o ti o contas, a citada administración local está incurrindo nunha ilegalidade que vulnera tanto o réxime administrativo común mesmo os principios constitucionais fundamentais. Resulta evidente que nun entorno legal de teórica cooficialidade, o cidadán pode dirixirse á administración na lingua que desexe dentro das opcións lexítimas. Outra cousa é que a administración teña: primeiro, os modelos de solicitude redactados en galego; segundo, as contestacións ás solicitudes ao cidadán se fagan en galego. Podería citarche numerosas sentencias tal que esta, pero noutro sentido, onde o Tribunal Constitucional xustifica e permite o uso dunha determinada lingua vernácula considerada propia vía estatutaria como lingua "habitual" de comunicación entre administración e cidadán e tamén como lingua "habitual" de redacción das diversas actas, documentos, resolucións, etc,. derivadas da actuación administrativa. Nada hai de discriminatorio neso sempre e cando se asegure que o cidadán poda entender e comprender o contido dos mesmos, polo cal ten dereito a esixir unha traducción á súa lingua de uso habitual.

[SIGUE]

TRESILLO dijo...

Respecto da subvención. Certamente, tés razón...coñezo as bases da mesma por diversas circuntancias é un dos requisitos para obter a citada subvención é ese (o uso xeral do galego, ollo, só respecto do acto subvencionado por parte da "asociación"). Agora ben, non estamos aquí no mesmo ámbito de actuación administrativa que no anterior. En primeiro lugar, porque non estamos ante o exercicio dun dereito por parte dunha persoa física, senón xurídica, que evidentemente ten tamén certos dereitos, pero máis restrinxidos; en segundo lugar, e máis importante, unha cousa é o dereito a solicitar calquera subvención e outro a obtela. Neste derradeiro senso, eu teño dereito a solicitar unha subvención, pero para obtela teño que, en primeiro lugar, cumprir cos requisitos que me esixe a entidade concesionaria e, segundo, respectar as obrigas impostas polas bases da mesma. Fóra desta dimensión xurídica, o certo é que os políticos, dentro da legalidade, teñen dereito a estipular as condicións que teñan por convintes para atender aos fins que desexen perseguir con tales accións. Nada hai de imposición, nada hai de coacción, cando a través de subvención, ademais de fomentar a cultura e o deporte, se trate de fomentar o uso do galego. Así o fai o "Instituto Cervantes" alí onde está instalado cando subvenciona ás Universidades extranxeiras para fomentar o uso do castelán establecendo unha serie de condicións de obrigado cumprimento. Que sepa eu fomentar o uso do galego non atenta contra ninguén nin coacciona a ninguén. Fácil resultaría dicir que aquelas persoas xurídicas (asociacións) que queiran expresarse en castelán discriminanse por non ter posibilidade de acceder a tales subvencións. Pero nesa lóxica argumentativa tamén eu podería dicir que a miña ideal empresa "vitivinícola" discriminase por razón de "orixe" cando solicito unha axuda destinada á Ribeira Sacra e teño instalado os viñedos en Portonovo. A administración, no seu haz de potestades, ten a capacidade de promocionar e fomentar aquelo que considero preciso de xeito motivado (desde logo fomentar o galego está absolutamente xustificado dada a súa realidade social).

Respecto o camiño intermedio (e para rematar e non rebentarte máis). Eu non sei si liche ou entendiche ben a sentencia. Entendería que trataras de expoñer os teus arguementos e razóns en contra da postura do Constitucional, pero non que a pases polo arco do triunfo e establezas ti o que é ou non o ámbito real da liberdade. O TC advirte claramente que o "dereito á educación" non é un dereito dispoñible dos pais nin alumnos, senón que son os poderes públicos os que determinan o modelo eduacional e, por suposto, a lingua vehicular. Logo, se a lei e os regulamentos que rixen en materia educativa establecen como obrigas que os profesores (como funcionarios que son) e os alumnos deben expresarse na lingua prestablecida, así se debería cumprir. Porque ao igual que o alumno e o profesor, nin o papá de turno, poden dispoñer que cinco por cinco sexan vinte e non vintecinco...nada teñen que obxectar os profesores respecto dunha lingua vehicular que se atope dentro da lexitimidade constitucional (o espacio académico non é o espacio persoal, familiar ou laboral privado). A educación é un dereito das persoas pero unha "competencia" dos poderes públicos.
Agora ben, este argumento que acabo de plasmar, como o propio do TC tamén permite que as políticas que pretende promover Feijóo se encadren dentro dun marxe de plena lexitimidade. E eu non nego que as medidas sexan legais, o que nego é, en primeiro lugar, os presupostos falaces dos que parten esta nova política; e, en segundo lugar, as consecuencias que van ter sobre unha lingua absolutamente minoriza e, sobre todo, sobre os futuros cidadáns desta comunidade.

Nada máis, xa vos dín de abondo a paliza...

Un saúdo...

xogador de chica dijo...

Bien Tresillo!

Escapado dijo...

Jajajaja!!! Esta si que mola , pobre vaquiña sendo victima das perversas forzas de ocupación españolas, que se vaiam, e eso que estes son uns santos, que se chegan a ser os de verde... eses si son mala raza... jojojojo!!!

Norit dijo...

Agradezo a tua explicacion malia que non podo compartila Non teño o control do mundo das leis que me permita ofrecer unha alternativa ao que expoñes Pero mootas veces é cuestion de aplicar o que tan acertadamente chamamos sentidiño

Rebato os argumentos da castelanizacion con exemplos particulares porque son situacions que se están a dar a diario

É certo que non é posible obter un documento nun Concello en castelan salvo que o pidas expresamente -que eso si tes todo o dereito- e con redignacion esperas pola traducción. Pero é tan complicado facelo bilingüe e garantir a igualdade de oportunidades de todos desde o primeiro momento?

Ten sentido estar excluido dunha subvención porque non falas galego ou empregas esa lingua habitualmente nunha comunidade destinataria que pode ser castelan falante?

Entendo como a maioria dos galegos que lexitimamente confiamos nun cambio de Goberno que a lingua non debe ser un instrumento de imposición ou censura e normalizar debera ser promover e non obrigar... Camiñar cara a convivencia dos dous idiomas, cara o bilingüismo natural non é nunca un erro senon ser fiel a natureza maís real da gran parte de pobos e cidadesde Galicia

Faragullas dijo...

Estou ata os collóns de tanta demagoxia e das absurdas reivindicacións Galiciabilingüarias. Parece que andades polo mundo cunha venda nos ollos. Cando a persoa máis analfabeta de Galicia (e por suposto monolingüe en galego) vai a unha administración e se atopa cun interlocutor castelanfalante é capaz de comprendelo. Pero en cambio parece que un cidadán monolingüe en castelán non é quen de cubrir un impreso en galego. Pois ben, isto pode ser por dous motivos: ou que haxa un terrible déficit educativo en galego (habitual en moitas comarcas); ou o que é peor, que esa incomprensión sexa voluntaria, produto do odio e desprezo cara a lingua propia. En calquera caso, a normalización lingüística do galego é un obxectivo que aínda non se acadou, e polo visto moita xente ten a esperanza de que nunca se acade.
Dende esa postura de desprezo ó galego, quere facérsenos pensar (con argumentos como mínimo ridículos) que se discrimina ós castelanfalantes e se vulneran os seus dereitos nunha comunidade na que esa lingua ten xa un predominio aplastante en tódolos ámbitos da vida diaria, como ben expoñía Tresillo na anterior entrada.

Moléstame especialmente a perigosa arma da amabilidade lingüística. Porque non vos enganedes, a amabilidade lingüística debe ser exercida por nós, os desconsiderados e radicais aldeanos galegofalantes. Parece que cando se comunican dúas persoas debe facerse por decreto nun mesmo idioma, que será a tódolos efectos o castelán en caso de non coincidencia. Moi raramente te atoparás cun castelanfalante que cambie de idioma para dirixirse a ti (e ninguén o considera necesario), pero si con galegofalantes que renuncian á súa lingua á primeira de cambio, comportándose desta forma como cidadáns modélicos. Pois ben, eu non penso ceder, e expresareime en galego cando fale con calquera persoa orixinal de Galicia ou que resida habitualmente na nosa comunidade. Do mesmo xeito, non espero que aquelas persoas para as que o castelán sexa o seu idioma materno e no que se senten máis cómodos cambien de lingua cando falan comigo, xa que ambos nos comprendemos perfectamente (sempre que non haxa mala predisposición ó entendemento por algunha das dúas partes) . De feito creo que ese é o maior signo de normalidade, de bilingüismo e de convivencia harmónica entre dous idiomas.

Anónimo dijo...

Unha imaxe vale máis que mil palabras...así que só hai que visualizar a foto para darse conta da realidade deste "amable" pensamento.

Doríforo.

corredordebolsa dijo...

Os galegos somosche ben listos, cando emigraron a Alemania aprenderon a falar Aleman, cando a Gran Bretaña falaron o ingles, non flemos dos que foron para Suiza, eses ate falban dous idiomas dependendo dos cantóns...
e alguns con tanto problema de entendimentos, tan curtos eles, Non paga a pena gastarse tresillo, nos sempre poliglotas outros tan só glotas.--

Anónimo dijo...

Cando o BNG tratou de impoñer o galego e eliminar a liberdade de fala cometeu un erro tremendo. Destas chuvias, estes lodos... Defender o noso pasa por saber que en Galicia hai moita xente que fala galego e castelán sen ningún problema e que así é como queren seguir facendo. O novo Goberno da Xunta non podía deixar de corrixir a imposición suicida dos nacionalistas

xogador de chica dijo...

¿Pero ti sabes ler, chaval? Dalle un repasiño ó artículo outra vez, anda; e cavila senón habería máis ben un consenso sobre a necesidade de protexer e fomentar o galego, unha idea que o bipartito non fixo senón poñer en práctica, e un consenso que acaban de romper o PP e as patrañas da G.B. dos cojones. Hasta os huevos xa de gilipolleces.